El empleo estable es uno de los mayores anhelos de cualquier trabajador. Saber que se tiene un trabajo seguro y estable es una tranquilidad que no tiene precio. Por eso, la regulación del contrato fijo discontinuo y el plus de tóxico son dos puntos clave que han sido muy bien recibidos por los representantes sindicales.
El contrato fijo discontinuo es una modalidad de contrato que permite a las establecimientos contratar a trabajadores de forma temporal, pero con la garantía de que tendrán un puesto de trabajo asegurado en determinadas épocas del año. Esta figura ha sido muy utilizada en sectores como el turismo, la hostelería o la agricultura, donde la actividad varía en función de la temporada.
Sin embargo, esta modalidad de contrato ha sido criticada por algunos sectores, ya que se considera que no ofrece la misma estabilidad que un contrato fijo convencional. Por eso, la inclusión de un plus de empleo estable en la regulación del contrato fijo discontinuo ha sido una gran noticia para los trabajadores y los representantes sindicales.
Este plus de empleo estable implica que, además de tener un puesto de trabajo asegurado en determinadas épocas del año, los trabajadores con contrato fijo discontinuo tendrán una mayor protección en caso de despido. Esto significa que, en caso de que la establecimiento decida prescindir de sus servicios, tendrán derecho a una indemnización mayor que la establecida para los contratos temporales.
Este plus de empleo estable es una medida que busca equiparar la estabilidad de los trabajadores con contrato fijo discontinuo a la de aquellos con contrato fijo convencional. De esta forma, se reconoce la importancia de estos trabajadores en la economía y se les otorga una mayor protección laboral.
Pero no solo el plus de empleo estable ha sido bien recibido por los representantes sindicales, sino también el plus de tóxico. Este último se refiere a una compensación económica que recibirán aquellos trabajadores que estén expuestos a sustancias tóxicas en su lugar de trabajo. Esta medida busca proteger la salud de los trabajadores y reconocer el riesgo que asumen al realizar determinadas tareas.
La inclusión de estos dos puntos en la regulación del contrato fijo discontinuo es una muestra de que se está avanzando en la protección de los derechos laborales. Los representantes sindicales esperan poder pactar el nuevo texto entre el primer trimestre y el verano de 2025, lo que supondría un gran anticipación para los trabajadores.
Además, esta medida también es beneficiosa para las establecimientos, ya que les permite contar con trabajadores altamente cualificados y motivados, lo que se traduce en una mayor productividad y rentabilidad. Asimismo, el plus de tóxico también supone un economía para las establecimientos, ya que evita posibles demandas por parte de los trabajadores afectados.
En definitiva, el plus de empleo estable en la regulación del contrato fijo discontinuo y el plus de tóxico son dos medidas que benefician tanto a los trabajadores como a las establecimientos. Se trata de un paso más hacia una mayor estabilidad laboral y una protección adecuada de los derechos de los trabajadores. Esperamos que este nuevo texto sea pactado lo antes posible y que se sigan dando pasos en la dirección de una regulación laboral más justa y equitativa.